Fiscalía del EDOMEX incauta 5.6 millones de pesos en efectivo y tenis de colección en casa de exalcaldesa.
Su esposo es prófugo de la justicia, es acusado por presuntos nexos con la Familia Michoacana.
En noviembre de 2024 se llevó a cabo el Operativo Enjambre cuyo objetivo fue desmantelar redes criminales que vinculaban a funcionarios con el crimen organizado en el Estado de México, entidad gobernada por Delfina Gómez Álvarez.
Se detuvo a María del Rosario “N”, quien se desempeñó como presidenta del municipio mexiquense de Santo Tomás de los Plátanos, quien fue vinculada a proceso por su presunta responsabilidad en el delito de extorsión, tras ello, sus abogados presentaron un amparo de “improcedencia” durante su detención, si bien una juez determinó liberarla el domingo 26 de enero, las autoridades le cumplimentaron una segunda orden de aprehensión.
A razón de ello, la Fiscalía estatal realizó un cateo en un inmueble propiedad de la exedil ubicado en un fraccionamiento de la colonia San Felipe Tlalmimilolpan, en la zona limítrofe entre los municipios de Toluca y Metepec, una zona de alta plusvalía.
En dicho lugar las autoridades incautaron 5.6 millones de pesos en efectivo y una colección de tenis Gucci y Louis Vuitton, cuyos precios oscilan entre los 17 mil y los 25 mil pesos el par, así como bolsos de mano de las mismas marcas cuyos costos van de los 44 mil y 53 mil pesos por unidad.
De igual forma agentes del organismo aseguraron y colocaron sellos oficiales en el inmueble mencionado dado que las investigaciones sugieren que pudo haber sido utilizado para ocultar bienes de procedencia ilícita, ya que no se pudo acreditar el origen legal de lo encontrado, al tiempo que también promovieron el procedimiento de extinción de dominio, lo que podría derivar en la pérdida total de los derechos de propiedad sobre estos bienes.
Actualmente la imputada se encuentra recluida en el Centro Penitenciario y de Reinserción Social de Santiaguito, en Almoloya de Juárez, por su presunta participación en tres casos de extorsión, delito que se castiga con penas que van de los 40 a los 70 años o prisión vitalicia.
Cabe decir que Pedro Luis Hernández de Paz, esposo de la detenida, es prófugo de la justicia, ya que también es buscado por las autoridades mexiquenses por presuntos nexos con la Familia Michoacana, organización a la que presuntamente otorgó apoyo y protección.
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