El municipio tampoco dispuso los registros contables, ni presupuestales por más de 968 millones de pesos
Víctor Estrada, exalcalde de Cuautitlán Izcalli, aún debe aclarar, ante la Auditoría Superior de la Federación (ASF), el destinó de 706 millones 229 mil pesos, pues este ente fiscalizador no pudo identificar la aplicación -en el capítulo de Servicios Personales- para financiar nóminas, con los recursos de las participaciones federales.
De acuerdo con la última entrega del informe de la Cuenta Pública 2018, la ASF también promovió el inicio de dos promociones de responsabilidad a exfuncionarios municipales por no tener registros contables, ni presupuestales y por posibles fallas en el control interno de ese ayuntamiento.
La ASF revisó el rubro de servicios personales y advirtió que de los recursos que se entregaron a Izcalli no pudo identificar un monto de 706 millones 229 mil pesos
La auditoría 851, hecha por la ASF arrojó una solicitud de aclaración millonaria al anterior gobierno de Cuautitlán Izcalli, una de las más altas, junto con las de los municipios de Ecatepec y de Naucalpan para la cuenta 2018.
En esa revisión, los auditores determinaron que los recursos federales transferidos durante el ejercicio fiscal 2018, por concepto de participaciones federales a municipios, en el caso de Cuautitlán Izcalli fueron por 968 millones 513 mil de pesos, de los cuales se revisó una muestra de 706 millones 229 mil pesos, que representó el 72.9%.
La solicitud de aclaración
La ASF revisó el rubro de servicios personales y advirtió que de los recursos que se entregaron a Izcalli no pudo identificar un monto de 706 millones 229 mil pesos, correspondientes al capítulo de Servicios Personales de las nóminas financiadas con los recursos de las participaciones federales.
Por ello, emitió una solicitud de aclaración para que el municipio de Cuautitlán Izcalli aclare y proporcione la documentación adicional justificativa y comprobatoria de 706 millones 229 mil 200 pesos.
El control interno
Al analizar el control interno la ASF observó que Izcalli no proporcionó evidencia documental sobre la requisición de la evaluación de control interno, por lo cual no analizó el sistema de control interno instrumentado en ese municipio, como administrador y ejecutor de los recursos de las participaciones federales a entidades federativas para el ejercicio fiscal 2018.
La Auditoría Superior de la Federación consideró que la entidad fiscalizada no dispone de estrategias, ni de mecanismos de control adecuados sobre el comportamiento de las actividades que se realizan en la operación para garantizar el cumplimiento de los objetivos, la observancia de la normativa y la transparencia, por lo cual emitió una promoción de responsabilidad administrativa.
Los auditores también advirtieron que el municipio no dispuso de los registros contables, ni presupuestales de las erogaciones realizadas con las participaciones federales a municipios 2018, por 968 millones 513 mil pesos, pues reportó el total del gasto por 977 millones 127 mil pesos, que incluyen recursos de otra fuente de financiamiento.
Por ello, emitió una segunda promoción de responsabilidad administrativa para que el Órgano Interno de Control de Cuautitlán Izcalli realice las investigaciones pertinentes y, en su caso, inicie el procedimiento administrativo correspondiente por las irregularidades de los servidores públicos que, en su gestión, no dispusieron de los registros contables y presupuestales.
Hasta 2020 no había aclarado los recursos
En los comentarios de la entidad fiscalizadora, se señala que la documentación proporcionada por la entidad fiscalizada, para aclarar o justificar los resultados y las observaciones presentadas en las reuniones, fue analizada para determinar la procedencia de eliminar, rectificar o ratificar los resultados y las observaciones, pero hasta enero del 2020 no se habían solventado.
“En atención a los hallazgos determinados la entidad fiscalizada remitió los oficios número SHP/DGA/DAEFRF/1822/2019 de fecha 25 de noviembre de 2019 y TM/STE/PAF/0019/2020 de fecha 07 de enero de 2020, mediante el cual se presenta información con el propósito de atender lo observado”.
“No obstante, derivado del análisis efectuado por la Unidad Auditora a la información y documentación proporcionada por el ente fiscalizado, se advierte que ésta no reúne las características necesarias de suficiencia, competencia y pertinencia que aclaren o justifiquen lo observado, por lo cual los resultados 1, 4 y 6 se consideran como no atendida”.
Únete a la conversación